Los días 10 y 11 de septiembre, en el Colegio Jesús María de Bella Vista, tuvo lugar el Encuentro Misionero JM en el que participaron 300 jóvenes de los grupos misioneros de Argentina- Uruguay, bajo el lema «Amá a tus hermanos, que el mundo necesita de tus manos».
Durante esos días hubo momentos de oración, encuentro, compartir y de salir en misión al encuentro de distintas personas en los asilos, centros de recuperación, barrios, etc. Realmente Dios ha estado llevando este encuentro adelante y hemos sentido fuertemente su presencia. Fue muy lindo ver tantos jóvenes enfocados en Jesús, en la misión y en el encuentro.
Compartimos el testimonio de algunos jóvenes que nos cuentan su experiencia y expresan su acción de gracias y la alegría de sentirse parte de la gran familia de Jesús María:
“Difícil resumir lo que se vivió en este encuentro en pocas palabras. En estos dos días donde nos encontramos como comunidad se vio vivo el propósito por el cual nos gusta ser misioneros: el compartir la vida con el otro.
Este es el segundo año que me animé a ir al encuentro e igual que el año pasado, me emocionó mucho ver como Jesús María nos une, no solo como comunidad, sino que como grupo de misión. Ver a tantas personas movidas por el mismo espíritu servicial es algo que llena el alma. Esto se trató de mucho más que solo ir al encuentro de otros, fue un fin de semana en el que compartimos momentos y experiencias que nos van a marcar para toda la vida, y que nos van a ayudar a ser mejores misioneros, referentes y personas.
El vivir esto me hizo darme cuenta que no importa cuántos kilómetros nos separen o si tenemos distintas tonadas, lo importante es que juntos, como Jesús María, logremos llevar la alegría y el amor que nos regala Dios a todos aquellos que más lo necesitan. Y para terminar, me gustaría decir que lo que más me gustó de este encuentro fue el sentirme como en casa y acompañada por todos los misioneros y misioneras de los distintos lugares. Se nota que formamos parte de una gran familia, que es Jesús María. Más que agradecida por esta experiencia!!”
Clari Lopez Alconada, JM Buenos Aires
“Compartir estas ganas de darnos, esta locura de amor con esta familia tan linda que es Jesús María es algo increíble. Ser todos de distintos lugares, distintas edades y que nos llene de alegría y que nos mueva a estar ahí lo mismo, Él mismo.
Entregarnos es la clave, y aunque a veces cueste, siempre pero siempre seguirlo porque Él nos lleva a estas experiencias de darnos al otro donde en ningún otro lugar vamos a encontrar más felicidad”.
Luli Larcade, JM Bella Vista
Compartimos la alegría, las ganas de bailar, de servir, de ayudar, de dar todo lo que tenemos, de ofrecernos a los que nos necesitan…
Jose Emma, JM Córdoba
Creo que en esta experiencia de misión, fuimos las manos de Jesús y María, un reflejo de Dios. Creo que el “para qué” de nuestra misión, para la que nos puso Dios, fue alegrar con una simple sonrisa, una charla a personas que a lo mejor no encuentra un sentido a la vida.
Esta experiencia también nos ayudó a conocernos más entre nosotros y entre los Jesús María de los diferentes lugares, y aunque nos veamos una vez al año en el encuentro misionero tenemos un lazo muy fuerte que nos une: la fe, las ganas de misionar y formar parte de algo tan lindo como la familia Jesús María.
Marti Farias, JM Córdoba
“Cada detalle, desde los juegos, las canciones, los grupos, la adoración, los apostolados y misiones, salieron increíbles y eso fue fruto del trabajo de parte de toda la comunidad para hacernos posible el encuentro entre nosotros y con Dios…. Si tengo que definir el encuentro en una palabra no podría, porque fue algo de Dios. Vinimos tan llenos espiritualmente que lo único que puedo hacer es agradecer.”
Lourdes López, Córdoba
“Una de las cosas que me llevo de este encuentro tan lindo, fue ver ese espíritu misionero en cada una de las personas que conocí en Bella Vista. Ver esa felicidad, esas ganas de ir para adelante que, sinceramente, me lleva a pensar que el mundo en el que vivimos no está para nada perdido, y eso me llena el corazón.”
Fede Blacizza, JM Córdoba